Cuidado de los zapatos de cuero: Tips y recomendaciones

cuidado de los zapatos de cuero

El cuero siempre ha sido uno de los materiales que mejor ha definido el concepto de calidad en el calzado. Sin embargo, cuando llega la hora de su correcto mantenimiento, parece activarse una relación de amor y odio entre los usuarios y este tipo de calzado que no debería ser así. Porque, si bien es cierto que el cuidado de los zapatos cuero requiere de un ligero aprendizaje por las características singulares de este material, hemos de decir que no es tan difícil tratarlos como se debe, para, de este modo, tenerlos siempre impecables y alargar su vida útil años y años.

Independientemente de todo el tedio que supone el cuidado de los zapatos cuero (acostumbrados/as como estamos a no limpiar regularmente nuestros diferentes modelos de calzado, ya sean zapatos, zapatillas o sandalias , por ejemplo), resulta casi imposible no tener en nuestro zapatero al menos un par .  

Como sabemos en Zapaterías Bogar que el cuidado de los zapatos de cuero de nuestro armario levanta ciertas ampollas en algunos/as, vamos a revelar algunos tips y recomendaciones para que los mantengáis en las mejores condiciones posibles de ahora en adelante .

Métodos para el cuidado de los zapatos de cuero

La primera premisa a comentar (y que es una pregunta habitual que nos hacen en nuestras tiendas de Zaragoza), el cuidado de los zapatos cuero no es una actividad que debamos hacer, ni mucho menos, todos los días. Dicho esto, sí que se debe acometer con cierta frecuencia para nutrir bien el cuero, y claro está, preservarlos del desgaste del tiempo o eliminar las manchas de suciedad.

Ya sabemos que el cuero es elegante y sofisticado y que da gusto calzarlo, pero también es un material delicado que debemos tratar con más asiduidad que otros materiales sintéticos.  

Vamos a distinguir dos tipos de limpieza en el cuidado de los zapatos de cuero: la ordinaria y la extraordinaria. La primera es más frecuente y se puede realizar en cualquier momento que creamos que es necesario; la segunda es más minuciosa y requiere herramientas y técnicas profesionales (que nosotros/as mismos/as podemos realizar).

1️⃣ Limpieza ordinaria (con productos caseros)

En Internet podemos encontrar muchos productos caseros con los que limpiar nuestro calzado de cuero, de manera que vamos a mencionar los que consideramos más efectivos.

  • Vinagre

Como expertos en calzado, hemos comprobado en Zapaterías Bogar que pequeñas cantidades de vinagre blanco, aplicadas con un trapo suave, pueden quitar las manchas de los zapatos de cuero.

  • Aceite de oliva

El aceite de oliva con unas gotas de jugo de limón ayuda a eliminar parcialmente las manchas, pero no es definitivo. Sí que es efectivo, sin embargo, en casos de emergencia para abrillantar los zapatos. Podemos aplicar esta mezcla con un paño grueso de algodón o una esponja y dejadlo actuar unos pocos minutos, luego retirad el producto con un paño limpio.

  • Migas de pan

Depende del tipo de mancha que necesitéis quitar, pero frotar un trozo de pan rallado puede ayudar a eliminarla. Suena raro e improbable, ¿verdad ? Pues funciona…

  • La leche

Tomad una bola de algodón y verted una gota de leche, luego frotad suavemente sobre la mancha existente en el calzado, sin mojarlo por completo. De este modo, posiblemente consigamos hacer desaparecer la suciedad en forma de manchas en los zapatos ..

Eso sí, debemos evitar emplear este producto en los modelos de piel clara, porque la leche suele amarillearlos, mientras que en el caso de los zapatos de piel oscura, no ocasionan este efecto. Aconsejamos acudir a este método solamente en casos extremos, ya que puede ser una buena opción para dejar los zapatos listos y usarlos inmediatamente.  

  • Toallitas para bebé

Si nos es urgente limpiar los zapatos, podemos usar unas toallitas húmedas para bebés, ya que son bastante suaves y no dañan la piel del calzado. Además, las propiedades nutritivas e hidratantes de estos productos garantizan un buen resultado en los zapatos de cuero.

  • Jabón de Marsella

Recipiente con agua tibia, ponemos a disolver un poco de jabón de Marsella (también se puede optar por alcohol o un poco de detergente para platos), y sumergimos un paño en él. A continuación, lo sacamos del agua y lo escurrimos bien para evitar que manche la piel del zapato.

Posteriormente, podemos empezar a frotar desde un pequeño punto escondido para analizar la reacción del producto en la piel del calzado. Si el resultado nos gusta, podemos continuar con la limpieza.

Ojo, ninguno de estos productos caseros recomendados para el cuidado de los zapatos cuero, están diseñados específicamente para limpiar este tipo de calzado. Ello significa que, en algunos casos, y por su incorrecta aplicación, podrían generar otras manchas, incluso rayas difíciles de subsanar. Sugerimos, por consiguiente, emplearlos con moderación, y tras probarlos en una zona menos expuesta y visible del zapato.

2️⃣ Limpieza profesional

Si optamos por realizar el cuidado de los zapatos cuero de manera profesional, existen algunos productos especialmente fabricados para quitar manchas, limpiar y pulir la piel de esta clase de calzado. Se aplican, además, ciertas técnicas que engloban el siguiente proceso:

  • Usar un cepillo suave

Antes de utilizar cualquier limpiador, es importante eliminar el polvo y cualquier resto de suciedad, ya sea tierra o barro seco. Para ello, frotamos suavemente la piel del zapato con un cepillo suave de cerdas naturales.

Prestad atención hasta a las zonas más complicadas, limpiando tanto la parte superior como las costuras. Si se trata de modelos con cordones, os sugerimos quitarlos tanto para limpiar mejor el calzado como para no mancharlos durante el paso de la crema o betún.

  • Lavar con una esponja

Después de haber retirado el polvo y los restos de suciedad, se debe pasar a la fase de lavado. Con una esponja húmeda (no tan mojada), se frota suavemente por toda la piel del zapato; luego se deja secar bien durante un par de horas.

Conviene destacar que también existen limpiadores de calzado neutros, pero no es imprescindible utilizarlos.

  • Pulir con betún

Con un paño suave, aplicamos una pequeña cantidad de betún al zapato. Este producto debe tener un color similar al del cuero. Si usamos un betún neutro, el calzado perderá brillo o se oscurecerá. Consejo: distribuid la crema por toda la superficie con movimientos ligeros y circulares.

  • Cepillado final

Tan pronto como se absorba la crema, se procede a cepillar nuevamente el zapato y se repasa con un paño suave para darle un retoque final. Una vez que el calzado esté perfectamente seco, debemos volver a meterlos en la caja.

Ojo, colocarlos en sobres o bolsas de plástico no permiten la ventilación correcta de los zapatos.

como limpiar zapatos de cuero
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Claves para no dañar el calzado de cuero

En el ejercicio de cuidar como es debido cualquier modelo de cuero que tengamos, un objetivo claro es tratar de no dañarlos. Vemos algunos trucos para conseguirlo :

  • No exponerlos directamente a la luz solar o fuentes de calor (el cuero puede secarse y deteriorarse). Siempre dejad que los zapatos se sequen naturalmente en la sombra.
  • El barro y el polvo deben eliminarse después de cada uso.
  • Nunca lavarlos en la lavadora.
  • Los olores desagradables se pueden eliminar durante el lavado, añadiendo un poco de bicarbonato o con polvos de talco para pies.
  • Usad el calzador para insertarlos. Ello aumentará la vida útil del contrafuerte, es decir, el inserto presente en el talón entre el forro y la parte superior.
  • Utilizad plantillas, de esta manera, alargaréis la vida del calzado absorbiendo la humedad del pie. Eso sí, también resulta importante quitárselas después de usar los zapatos para que se sequen y entren un poco de aire.
  • Tened en cuenta que cada material necesita cuidados y productos específicos.

Sugerencias Bogar calzado de cuero

Como siempre, nos gusta destacar algunos de nuestros modelos que tenemos disponibles en nuestra tienda online . Hoy tocan pares de cuero que quitan el hipo:

Laura Azaña LA11882NC-2

Calzado nacional de una de las marcas de moda del mercado. Las ventajas de los materiales naturales son evidentes: autenticidad, durabilidad y máxima protección. Este modelo, gracias a su suela ultraligera y gruesa, permite un uso continuado y confortable en cualquier entorno.

Laura Azaña LA11882NC-2
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Alma de Candela 855.2

Zapato mocasín clásico de mujer de estilo infinito y calidad contrastada, como todos los modelos de Alma de Candela, otra marca nacional en absoluto auge. Piel grabada (coco), con antifaz y detalles en granate. Excelente.

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Fluchos Zeta F0603

Un zapato moderno y elegante para hombre de la marca Fluchos. Confeccionado con piel de vacuno curtida, ablandada y súper confortable. Suela de caucha extra ligero y forro y plantilla polar transpirables. Un 10 de zapato.

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Fluchos Simon 8468

Este modelo va un paso más allá en cuanto a vanguardismo estético y elegancia. Disponibles en negro y marrón, son atemporales, multi ocasión y aportan un estilo formal y casual al mismo tiempo. Para todas las edades y situaciones. Un zapato evolucionado a las necesidades y perfiles de la sociedad actual.

modelo fluchos simon 8468
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Conclusiones

Comprar zapatos de cuero es una cosa, pero prepararlos para la temporada en que los usarás es otra muy distinta. Por este motivo, muchos/as vimos que nuestros abuelos se tomaban bastante tiempo para limpiarlos y pulirlos, usando productos diferentes para cada objetivo.

Hoy día es mucho más fácil realizar esta tarea, porque lo que se necesita es usar los productos adecuados (sean caseros o comerciales).  Existen, incluso, soluciones para engrasar y pulir el cuero con sus respectivas instrucciones de uso. La clave, sin embargo, para el cuidado de los zapatos cuero no es la elaboración de mezclas complicadas, sino la regularidad.

Si evitáis que la suciedad entre en las fibras del cuero, vuestro calzado os servirá por muchísimo tiempo. La limpieza diaria de los zapatos de cuero, ciertamente, puede llevar un tiempo que muchas veces no tenéis (y lo entendemos muy bien). Nuestro consejo final es que os dediquéis al menos una vez a la semana a limpiar y pulir vuestros zapatos, en aras de garantizar su durabilidad y belleza a lo largo de los años.

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